Vicent
Usó –nuestro profesor en la Uned Senior del Taller de Escritura-, dedicó su
clase del pasado 13 de noviembre a los artículos de opinión. Tras una
exposición teórica sobre los mismos visionamos un vídeo dedicado a la
obsolescencia programada. Concluida la proyección el profesor propuso como
ejercicio práctico la redacción de un artículo sobre el citado asunto. A
continuación reproduzco el que yo escribí:
"Tras
estas palabras un tanto extrañas se esconde una lamentable realidad: programar
la vida útil de un producto de tal
manera que tras un período de tiempo calculado de antemano por el fabricante,
dicho producto se torne inservible. Ejemplos clásicos de aplicación de esta
práctica son las bombillas, las impresoras y los iPod.
El
ejercicio de la obsolescencia programada supone defender una sociedad basada en
el consumo: comprar, usar, tirar y volver a comprar. Sus defensores afirman que
este sistema de vida no sólo genera unos beneficios empresariales sino que
también permite crear puestos de trabajo.
Frente a esta filosofía debemos recordar
que vivimos en una planeta de recursos limitados y en el que acumulación de
desechos –especialmente en los países del Tercer Mundo- puede conducirnos a la
catástrofe. Como solución al reto que
plantea el consumo sin freno hay economistas que defienden la teoría del
decrecimiento. Según ella es preciso disminuir de forma controlada la
producción para establecer un nuevo equilibrio con el medio ambiente y entre las
personas.
Como punto final de estas reflexiones podemos
preguntarnos si a nivel personal no practicamos una variante de la
obsolescencia programada cuando desechamos productos perfectamente válidos por
otros más nuevos. Defender frente a esta práctica el consumo responsable tal
vez podría llevarnos a vivir mejor con menos. Sin embargo ante la persistencia
de la crisis quizá lo que ocurra es que cada día vivamos peor con menos.”
.